ORANGE Y HI-TECH OZONE PATENTAN UN SISTEMA PARA PROTEGER A LAS PERSONAS
Más allá de los beneficios que el ozono tiene en la atmósfera, actuando como filtro de la radiación ultravioleta nociva (UV-B), el ozono también tiene propiedades biocidas, capaz de destruir numerosos virus, bacterias y hongos. Tanto, que según la OMS el ozono es el desinfectante más potente contra todo tipo de microorganismos —tanto unicelulares como pluricelulares— y, además, es más efectivo pues en treinta segundos de media es capaz de eliminar el 99,9% de microorganismos resistentes. Por ello, si se emplea como gas desinfectante a través de un tratamiento llamado ozonización, su uso puede servir para que los ambientes y aguas sean saludables y seguros.
Sin embargo, y al igual que la práctica totalidad de los biocidas conocidos, la utilización de técnicas de ozonización no es inocua y puede tener consecuencias adversas para la salud en el caso de que no se controlen el tiempo y los límites de exposición del ser humano. Encontrar la solución a este gran reto ha sido el trabajo durante más de treinta años de la empresa valenciana Hi-Tech Ozone, que junto a la multinacional de comunicaciones Orange ha desarrollado una tecnología de supervisión y control en tiempo real de sistemas de generación de ozono que puede utilizarse en entornos ocupados por personas. “Este es el reto al que hemos tenido que enfrentarnos: explorar una tecnología que, cumpliendo los estándares normativos en presencia y ausencia humana, sea inocua para el ser humano y eficaz en la eliminación de virus, bacterias y hongos”, explica Laura Segura, socia de Hi-Tech Ozone y del Grupo Segura. Un proyecto tecnológico que también ha sido posible gracias al apoyo financiero de la entidad BBVA.
Para ese uso seguro del ozono en ambientes interiores, Hi-Tech Ozone ha desarrollado la solución Free Virus Zone by Ozone, que consta de equipos de generación de ozono y un portal de gestión desarrollados también por la empresa valenciana. A ellos se añade la tecnología IoT de Orange, puesto que todos los elementos están sensorizados con el objetivo de poder realizar el seguimiento y control de los parámetros ambientales en tiempo real, incluso en remoto, así como el encendido y apagado automático de los equipos. Todo ello garantiza la utilización de ozono de forma segura dentro de los valores de exposición autorizados para espacios con presencia humana por la normativa nacional e internacional.