Quibim, compañía de biomarcadores de imagen para la medicina de precisión, sigue con el desarrollo de nuevos algoritmos. Entre sus últimos lanzamientos se encuentra QP-Liver, que mejora el diagnóstico de enfermedades hepáticas difusas mediante la cuantificación altamente precisa de la grasa tisular y el hierro, utilizando imágenes obtenidas por resonancia magnética. Una tecnología que ha recibido la certificación CE y UKCA para la Unión Europea y el Reino Unido, respectivamente, garantizando su disponibilidad para uso clínico en estos territorios.
Las enfermedades hepáticas crónicas suponen una carga importante para la población, provocando altas tasas de morbilidad y mortalidad, además de ejercer una enorme presión sobre los recursos sanitarios», explican desde Quibim. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades hepáticas son responsables de aproximadamente dos millones de muertes al año en todo el mundo.
Con este contexto, QP-Liver, que aprovecha los modelos de inteligencia artificial (IA) de Quibim, proporciona una segmentación hepática automatizada de alta precisión y correlaciona los resultados de la cuantificación de grasa y hierro con datos patológicos de referencia, permitiendo a médicos e investigadores realizar una gestión personalizada de las enfermedades hepáticas. Esto incluye, según apuntan, la detección temprana, un seguimiento riguroso y planes de tratamiento individualizados. La herramienta también reduce la necesidad de invasivas biopsias, proporcionando información sólida para decisiones informadas y mejorar la atención al paciente.