Todos debemos ser responsables de la protección de la infraestructura computacional que nos rodea y todo lo vinculado a la misma, es decir, de la ciberseguridad o seguridad informática. Los ciberdelincuentes están permanentemente buscando nuevas vías de atacar a los usuarios aprovechándose de su desconocimiento o vulnerabilidades en sus equipos.
La forma de defendernos es identificar los riesgos y usar los mecanismos de protección que existen a nuestra disposición. Por ello el INCIBE y la OSI han marcado una serie de recomendaciones que parten del sentido común (actualizar equipos, usar antivirus, mejorar el uso de contraseñas, vigilar de dónde se descargan las cosas, proteger la información con copias de seguridad,…) y van explicándolas y desgranándolas en distintas partes para abarcar todos los campos.
Puedes acceder a todas las recomendaciones en el siguiente enlace.